La dificultad para conciliar el sueño o cuando nos despertamos demasiado pronto, puede ser un obstáculo para llevar a cabo nuestras tareas del día a día.
Sentirás cansancio, no tendrás energía o recursos, estarás nervioso y/o irritable, y en ocasiones te costará sostener jornadas trabajosas a nivel cognitivo, emocional y/o relacional.
El insomnio puede ser también un precursor de otros trastornos psíquicos, y además puede incrementar su intensidad, por esto es una problemática que hay que cuidar con atención.En la terapia, este síntoma se considera en primer lugar a través de herramientas de la terapia cognitivo-constructivista, como el análisis funcional (que nos ayudan a comprender mas, diferenciando, lo que nos pasa adentro en los momentos de dificultad), con el objetivo de incrementar la conciencia y el manejo de la sintomatología. Sucesivamente se puede seguir con mas intervenciones (y a través del EMDR, y de la Terapia Sensoriomotriz).
